Adéntrate en las estrechas calles empedradas del Casco Histórico de Avilés y déjate envolver por su encanto medieval. Descubre monumentos emblemáticos como la Plaza de España, presidida por el Ayuntamiento, y la Plaza de Domingo Álvarez Acebal, donde se alza la imponente Iglesia de Sabugo. No te pierdas la oportunidad de explorar el Barrio de Sabugo, con sus casas de colores y balcones adornados de flores, que te transportarán a otra época.
Sumérgete en el universo cultural y artístico del Centro Niemeyer, un complejo arquitectónico único en el mundo diseñado por el afamado arquitecto brasileño Oscar Niemeyer. Admira su innovador diseño y disfruta de las exposiciones de arte contemporáneo, conciertos, espectáculos de danza y cine que alberga este espacio cultural de vanguardia.
Embárcate en un tranquilo paseo por la Ría de Avilés y contempla la belleza natural de este entorno privilegiado. Observa cómo las barcas de pesca regresan al puerto con su captura del día y disfruta de las vistas panorámicas de la ciudad desde el agua. Además, puedes disfrutar de una deliciosa comida en alguno de los restaurantes ubicados en sus orillas, donde podrás degustar pescados y mariscos frescos de la zona.
Escapa del bullicio de la ciudad y adéntrate en el oasis de tranquilidad que ofrece el Parque de Ferrera. Recorre sus senderos arbolados, descubre sus áreas de descanso y relájate junto a su estanque, donde podrás observar a los patos y gansos que habitan en él. Ideal para un día de picnic en familia o simplemente para desconectar y disfrutar de la naturaleza en pleno centro urbano.
Sumérgete en el pasado de Avilés a través de las exposiciones y colecciones del Museo de la Historia Urbana. Descubre cómo ha evolucionado la ciudad a lo largo de los siglos, desde sus orígenes medievales hasta la actualidad, a través de objetos, documentos y maquetas que recrean la vida cotidiana de sus habitantes.
Admira la majestuosidad de la Iglesia de San Nicolás de Bari, un templo gótico del siglo XIII que es uno de los principales monumentos religiosos de Avilés. Contempla su imponente fachada, sus altas torres y sus vidrieras coloridas, y entra en su interior para maravillarte con sus retablos, capillas y obras de arte sacro.
Deléitate con los sabores de la cocina asturiana en los bares y sidrerías de Avilés, donde podrás probar platos tradicionales como la fabada asturiana, el cachopo, los quesos asturianos y los pescados y mariscos frescos del Cantábrico. Acompaña tu comida con un vaso de sidra natural asturiana, la bebida por excelencia de la región, y vive una experiencia gastronómica inolvidable.
Relájate y desconecta en la playa de Salinas, uno de los rincones más hermosos de la costa asturiana. Además de tomar el sol y bañarte, puedes practicar deportes acuáticos como el surf, el windsurf y el kitesurf, o simplemente pasear por el paseo marítimo y disfrutar de las vistas panorámicas del litoral asturiano.
